-LII- LA COPA.

En mi jardín secreto se halla la copa que contiene las palabras verdaderas.

 

-LI- EL JARDÍN SECRETO.

El laberinto , con sus idas y  vueltas, permitía , de seguir el camino correcto, acceder al jardín secreto.

Aunque todo en el laberinto parecía diseñado para extraviarme, era en realidad la única forma de deshacerme del complejo e imperceptible entramado que me impedía acceder a mi jardín secreto.

 

-L- EL LABERINTO.

Una de las cosas que me explicó la ranamandra, fue que yo tendría que atravesar  el laberinto, mi propio laberinto, si queria llegar realmente a mi jardín secreto.

Llegar al centro no era fácil, puesto que había muchas direcciones engañosas y tenía que volver sobre mis propios pasos cuando me equivocaba; pero fue más complicado todavía darme cuenta de dónde estaba el laberinto.

 

-XLIX- LA RANAMANDRA.

Al poco de haber tomado uno de los caminos de la encrucijada, llegué a la Fuente Viva, donde me encontré con un poco conocido ser mitológico : la ranamandra.

Es un animal de aspecto aparentemente corriente y ese aspecto, hace que muchas veces pase desapercibido, cuando en realidad posee unas cualidades muy sorprendentes. A lo largo de su vida, este ser experimenta varias metamorfosis. Inicialmente vive en el agua, hasta que conoce todos sus secretos.
Más tarde, vive entre la tierra y el agua,  aprendiendo todo lo que respecta a la tierra. Posteriormente, adquiere caracteristicas de la mítica salamandra, alcanzando así todos los secretos del fuego.Y en la última fase de su vida, puede llegar a volar. Con lo que nada de lo existente en el aire y bajo él, le es desconocido. El periodo de tiempo entre una metamorfosis y otra, es de unos doscientos cincuenta años, por lo que no es raro que una ranamandra llegue a los mil años de edad. Como podéis suponer, mucho es lo que saben con una vida tan larga. Ésta en concreto, a pesar de su juventud, apenas quinientos treinta años, conocia perfectamente los diferentes idiomas humanos y  mucho repecto a nosotros, asi que fue un placer escucharla.

-XLVIII- LA ENCRUCIJADA.

Frente a mi, tres caminos desconocidos y uno solo conocido, el que provenía del pasado.

Tenía la sensación de que estaba esperando a alguien . Quién podía ser ese alguien en medio de la noche y en ese lugar solitario?... ese alguien debía de ser yo mismo. Tan pronto como me di cuenta de eso, pude tomar uno de los caminos y salir de la encrucijada.








 

-XLVII- LA LLAVE.

Después de traspasar la puerta, observé que había un nuevo objeto en mi equipo, una llave.

Esa puerta quedaba ya definitivamente abierta para mi, otras más me esperaban .