lunes, 10 de septiembre de 2012

-XXV- EL LUGAR DE LA SALUD.




Con las provisiones ya un tanto escasas llegué a tierra. Reconocí el nuevo territorio y no vi a nadie , sólo un camino con un rótulo de dirección que indicaba "Hwt-ntr Bastet"; sin saber de qué se trataba ni a qué distancia se encontraba, me dirigi allí.

A cosa de media jornada de caminar, llegué a Hwt-ntr Bastet , una edificación extensa y ajardinada de una sola planta, más bien se podria definir como un conjunto de jardines enlazados. En el zócalo de entrada, escrito en varias lenguas, muchas de ellas desconocidas para mi, ponía: "El lugar de la salud".

Y qué había alli para que eso fuese el lugar de la salud? pues nada a la vista , no se trataba de un Spa ni de una farmacia ni de un centro médico, sólo había un pozo de agua y una gata , tal como veis en el apunte de mi cuaderno.

Claro que acabé descubriendo que  la gata se las traia..., de momento descubrí que hablaba, poco, pero hablaba, asi que se presentó : "Soy Little B., esta es tu casa...siempre y cuando no te salgas del Maat" . No tenía ni idea de qué me estaba hablando, así que le pregunté sobre lo que me había dicho, a lo que me contestó : "Cuando no sepas si estás dentro del Maat o no, mirate en el pozo...más te vale! ji, ji,ji".

No entendí nada pero no tardé en descubrirlo, porque cada vez que no coincidia la imagen que yo tenía de mi, con la que se reflejaba en el agua del pozo, ya podía estar corriendo, porque la linda gatita se transformaba en una salvaje leona que  iba a por mi , nunca he corrido tanto en mi vida, sobre todo los primeros días. Además de las agujetas producidas por el violento y continuado ejercicio , estaba cubierto de arañazos, contusiones y marcas de dientes y no entendía por qué este era el lugar de la salud.

Con el paso de los días, llegue a hacer coincidir las dos imágenes, la mía y la reflejada en el pozo, así que las relaciones con Little B. mejoraron , aunque  yo tenía muy presente que en cualquier momento se podía convertir en una leona de nuevo.

Un día al despertarme, la vi junto a la puerta y me dijo: "ya puedes irte , ahora ya eres capaz de cuidar de tu salud tú mismo". Es extraño, pero no quería irme, le había cogido cariño. Ella leyó perfectamente mi sentimiento y me dijo : "no te preocupes, si haces el tonto volveré...y te vas a enterar, ji,ji,ji".

Lo creais o no, mi salud ha mejorado mucho desde ese encuentro.



 

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